Cisne Negro, llevo tiempo esperándola pero no encuentro quién me acompañe, yo no quiero ver Valor de Ley así que llevo crudo lo de Cisne Negro... pero al final el chico de los ojos azules me lleva. Tenía dos opciones o que me gustara o que no... y es que las críticas que había escuchado eran bipolares.
Desde luego lo que sí es cierto es el merecidísimo Oscar para Natalie Portman y lo que es más cierto todavía es que es una peli de tensión tensión tensión y no sabes lo que va a pasar al minuto siguiente. Natalie es una bailarina a la que le dan el papel del Cisne negro en el Lago de los Cisnes de Tchaikovski. En unas apenas dos horas ascendemos desde la elección a la noche del estreno y vamos compartiendo con la bailarina el desgaste psicológico y físico que el papel requiere. A la vez nos transmite la angustia que siente al querer alcanzar la perfección. Unida a esta lucha personal aparece la figura de la madre posesiva también bailarina dejó la carrera por su hija a cambio de no llegar a triunfar en el mundo del ballet. Todo este cocktail nos lleva a plantearnos muchas preguntas sin respuesta (bueno algunas sí la tienen, los tatus no son de bailarina)
¿Pueden las obsesiones de los padres pesar tanto en los hijos?
¿Por qué la rival para el papel parece más bien una bailarina de cabaret?
¿Por qué una bailarina lleva tatuajes?
¿Se entiende como acaba la película?
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